martes, 28 de diciembre de 2010

Bicicletas y ruedines


Hace poco me paré a pensar lo mucho que cambia nuestra perspectiva respecto al mundo, cómo de un día para otro, o de un mes a otro si queremos alargar un poco más el cambio, nada es lo que era antes. Aunque la diferencia sea mínima lo vemos como algo intenso y enorme. Porque el cambio asusta, la inestabilidad roza tu vida y te sientes como cuando te quitaron las rueditas pequeñas de tu bici. Sientes ese pequeño empujón que te dan tus padres y empiezas a pedalear, con las manos temblando y el corazón a 120 km/h. Recorres unos metros tambaleándote, haciéndo zig-zag. Y de repente de das cuenta, ya has cambiado, ya sabes utilizar tu bici de mayor. Te paras, miras hacia atrás y sonríes a tus padres, te vuelves a dar la vuelta y sigues hacia delante. La seguridad te invade y te sientes casi volando porque has conseguido algo que parecía imposible. Pero ahí no acaba, al poco tiempo te encontrarás con el bordillo de la acera y no sabrás lo que hacer. Primero por precaución te bajarás y miras con miedo hacia atrás, esta vez no puedes dar media vuelta. Impulsándote con un pie en el suelo subes la bicicleta y ya está todo bien de nuevo. Hasta que un día eres capaz de subir bordillos sin bajarte de la bici, saltando e incluso pedaleando a toda velocidad.

Pero todo es un proceso, lo que nos parecía imposible ahora es rutina, lo que antes era algo nuevo y extraño ahora nos parece lo más normal y lo mejor que nos ha podido pasar. Nos acostumbramos a todo, a veces nos cuesta más, otras menos. Y es que es imposible que no nos adaptemos a los cambios, estamos programados para ello. Llegamos a un punto en el que no nos sorprende lo que pasa a nuestro alrededor. La clave es seguir buscando cosas que nos asombren, que nos maravillen o que nos repugnen, pero que al menos originen una sensación en nosotros. Que nos hagan sentir algo más que un ser vivo.

martes, 21 de diciembre de 2010

Y cada día un instante volver a pensar en ti

Creo que dejé de escribir sobre mis sentimientos por miedo a volver a sentir lo que ya creía olvidado. Por precaución más que nada. Y ahora escribo y me paralizo, ¿qué se supone que siento? Todos los sueños, todo, todo y todo, todo el conjunto de mi ser interno y externo, todo mi yo, yo, ¿qué se supone que tengo que hacer conmigo? Lo llaman media naranja, como si sólo hubiese una mitad... Hay que probar todo tipo de naranjas hasta encontrar esa tan "perfecta" ni muy dulce ni demasiado ácida.

Ya no soy capaz de escribir mi "yo oculto". Quiero decir algo y ni encuentro las palabras ni encuentro el pensamiento. Las ideas están en paradero desconocido. Claro que algo anda mal, no vamos a pretender que todo sea perfecto bajo nuestra imperfectiva visión del mundo.

"Perderme en tu pelo y no encontrar a nadie salvo a ti. Respirando el aire que tú desechas, tu perfume, ¿de qué estás hecha? Mis sueños no olían tan bien. Envolví con mi cuerpo tu cuerpo, la electricidad recorre cada hueco que no queda cubierto por la piel. Era un puzzle imperfecto, lleno de piezas que faltan. El cielo no era suficiente comparado a tu mirada."

"Con lo pequeño que es el tiempo, me susuras al oído, y lo poco que nos cunde. El día debería tener 26 horas, te contesto. Pero tú ya no estás, te has permitido ser tu misma. Qué maravilla poder disfrutarte, y pensar que no somos más que carne y piel con la capacidad de sentir."

Y para terminar... "Siempre me quedará" de Bebe.



El vídeo es un poco ¿agobiante? Pero el tema es bastante triste, sobre la pérdida de un hijo. Ahora me he vuelto a aficionar a Bebe, me acuerdo de cuando mi madre compró el disco y lo escuchábamos todos los fines de semana...

jueves, 16 de diciembre de 2010

Sin título 1.

Me gusta cuando creas un documento word y se guarda como "Sintítulo1", qué místico... Ahora es cuando empiezo a hablar de tonterías y no me centro en lo que quiero decir. ¿Y qué es lo que quiero decir? ¡Si yo aquí sólo he venido para parlotear conmigo y poco más! Quizá hoy me vuelva a pasar lo mismo, empiezo a escribir, me paro, borro, vuelvo a escribir, borro de nuevo y cierro todo.

Será el SPM (o como se diga) pero estoy de un humor ~, y con eso quiero decir indescriptible, estos días. Lo dejo ahí, parecía que las cosas habían cambiado para mejor pero no, marcha atrás, parece un circuito cerrado. ¡Pero si la vida está más abierta que la entrepierna de muchas! Y ojo que no lo digo con malas intenciones, sólo por utilizar metáfora. Cada uno puede hacer lo que le dé la gana con su entrepierna y todo su cuerpo, si somos libres para opinar y pensar también lo somos para actuar. Pues eso, que la vida, y el mundo en general, es como un océano que de vez en cuando inunda tu diminuta isla para hacerla más maravillosa o un poco más desastrosa. La gente dice que tenemos que adaptarnos al cambio, ¿acaso no nos damos cuenta que la vida es cambio? Que es a eso a lo que tenemos que estar predispuestos y no a fijarnos una "rutina". También está eso de las marcas que separan años, las fechas de cumpleaños y los días de año nuevo son los más comunes. Como si a partir de una fecha fuésemos a empezar a mejorar, así de repente. No sé, este tema tenía más sentido en mi cabeza.

Creo que me voy a ir a dormir, cansada de esperar, ¿una señal? ¿De quién? Should I stay or should I go?

Y luego mi ecologista, ¿qué te pasa? Me frustra tanto no poder ayudarte, que no me cuentes por qué estás así, como si te hubiesen sorbido las ganas de reir. Y sin querer eso me lo pegas a mí. ¿No te das cuentas de que te quiero aunque no te lo demuestre tanto como debería? Que me enfada que os tratéis así porque parece que sólo sufres tú y estoy segura de que eso no es verdad, y me agobio. Me agobia saber que no puedo protegerte, no poder controlarlo todo para que tú estés bien, que por más que lo intente vuelvo a mi fase inicial, a ser él. Jo... Me gustaría no querer entenderlo.



Tú me entiendes, "Sarkozy, je suis de Sarkozy...". Qué bonita sonrisa M...

Y ya punto y a parte de esa conversación-comunicado, una de las canciones más tranquilizantes que conozco... Very biutiful.

PD: Berberecho, qué grande... qué bonito lenguaje que va más allá del amor hablado sólo por pinchos y berberechos... Ya te comentaré tu post con una dosis de ironía sobre ese tema en otro momento.

Se me olvidó otra vez...

Lo que iba a decir, hay que ver qué mala memoria... Que no, que es la canción devastadora de Chavela Vargas que cada vez que la oigo me entra un noséqué. También está la versión de Maná, más popera por así decirlo...

Y bueno la verdad es que yo quería decir gracias a todos aquellos que han ayudado/contribuido/etc a hacer que el día de mi cumple sea mejor que cualquier otro. Necesitaba un poco de aire, que alguien "fingiese" que le importo. No me estoy refiriendo a que no le importo a nadie, sino que por una vez no fuese yo otra vez la que queda para atrás, que saben que existo pero mi lugar está un poquito más alejado. No sé si me explico, no quiero malinterpretaciones. En definitiva, gracias a los nuevos y a los de siempre que este año me han felicitado de manera más especial, o de manera que yo lo haya interpretado más especial que cualquier otro año. Qué rayada tío... Cuánto nos complicamos a veces para decir algo, yo por lo menos por el miedo a no ser capaz de expresarme y que mis "buenas" intenciones se queden en intenciones.

Pero voy a sacar juventud de mi pasado


De Chavela Vargas, que hoy me ha dado por la música lenta y triste. Y yo quería decir más cosas como por ejemplo... ¿Por qué ese empeño en que el día de tu cumpleaños es especial? ¿Acaso no son especiales todos los días de tu vida? Algunos más y otros menos, pero especiales en algún sentido u otro. Que sí, que habrá algunos que serán una put^ mierda, ¿y qué le vamos a hacer? Es sólo uno, pero ojo, que no los tienes repes (como los cromos o los tazos, ¡oh! infancia querida...). Pues eso, que cada día es maravilloso (como las matemáticas, lo siento, cosas de mi profesor de física...). Y disfrutarlo es nuestro objetivos, ¿por qué nos empeñamos tantas veces en hacer lo contrario? Que no es sano, no es sano.

Disfruta de esto que dura muy poco, que antes de que te des cuenta estarás con una hipóteca al cuello y en una cama de hospital (por mencionar algún lecho de muerte) y la piel arrugada, o sin colágeno apenas que viene a ser lo mismo, y con el pelo gris/blanco, viviendo el presente en el pasado. No sé si me explico... ¡Que espabiles! Ojalá cuando llegue mi hora mire hacia atrás, suspire, y piense: qué maravilla de día.

Quizá lo importante no sea cómo morir sino con quién. Pero bueno, eso queda ahora muy lejos, os dejo con "Se me olvidó otra vez" de la ya mencionada Chavela Vargas. También añadir que esta canción sonó al final del último capítulo de la penúltima temporada de Los Hombres de Paco, un episodio que marcó un punto importante en mi vida. Dicho así suena extraño pero quien me conoce sabe por qué, sólo digo que la pelirroja no merecía morir, qué final más trágico.



PD: ¿por qué siempre que decimos inolvidable tiene connotaciones positivas?

lunes, 13 de diciembre de 2010

Make it happen

Debería estar ya en la cama, no puedo depender tanto del café. Antes tenía otros estimulantes. Es la falta de estímulos, de chispas, lo que nos hace caer en... ¿la rutina? Tampoco es éso, busco otra palabra. A propósito de búsquedas, ahora sólo estoy tras la pista de la simpatía. De una sonrisa que no esperabas. He descubierto el placer oculto en la sonrisa de un desconocido/a, mejor si es desconocida. O quizá no tan desconocido, alguien frecuente en tu vida pero sólo de vista. ¿Qué mejor manera de alegrarse la vista? Tanta chorrada de cuerpos diez, abdominales, triceps, glúteos,... Joder que cuando empiezan a decir tantos músculos parecen piezas de un coche en vez de un cuerpo. Que sí, que soy la primera que se fija en eso, que también está fenomenal tenerlo y que lo tengan, pero no me neguéis que una bonita sonrisa pintada en una cara no es algo genial. Jocomomolas me dan ganas de decir. Por eso, propósito de la semana, sonreir y que te sonrían.
Creo que ya lo he mencionado, pero por desgracia o por suerte a veces lo mejor que podemos ofrecer de nosotros mismos es una sonrisa. Y si enseñas los dientes mejor que mejor.
Y ahora, la canción del día, o de la noche, como quieras/queráis verlo. Tengo problemas con esto de escribir, ¿a quién me dirijo? ¿A vosotros, a ti, a mí, a ella,...?



Canción recién descubierta gracias a http://www.megustascuandocallas.com/, aquí a hacer propaganda. Hala, hasta mañana a las 8 (7 y 17 pero bueno...)

domingo, 12 de diciembre de 2010

Is it right to fall this way?

Como una opresión el pecho, humo dentro y mucha mierda.
Ruido, mucho ruido, sin saber lo que pasa, evasión.
Palabras vacías, no saber qué decir, no sé qué va mal.
¿Por qué otra vez? No me importa hundirme en el barro si tengo motivos para levantarme.
¿Y ahora? Prueba a escuchar dos canciones al mismo tiempo.



Esta es sólo una. Qué alivio, necesitaba ruido.

No es tristeza, es ganas de gritar. Dammit, ganas de huir y no tengo nada que temer. ¿Qué ha sido el cañonazo que me ha hundido? ¿Botón autodestrucción? De verdad que no tengo ni put^ idea de lo que va mal.

Y eso de ahí arriba es una versión con censura de mi estado de ánimo hace unas horas.

Ahora... La nada dentro del vacío más profundo.

jueves, 9 de diciembre de 2010

Help!

Una canción que siempre me obliga a escribir es "Imagine", de John Lennon.



Una maravilla para los oídos.

Pero ya está, no se me ocurre nada más. Tendría que estar redactando algo sobre el egoísmo humano, si está o no en la base biológica, cosas de filosofía, esas que nos hacen pensar un poco cada día. Pero hoy no estoy para muchos pensamientos. Fuera aparte, he conseguido que salgan los vídeos de youtube: ¡viva! Por fin, por fin. Me voy a inflar a poner canciones y demás.

Bueno ahora mucho mejor, suena en Spotify "Stand by me". Oh, yeah. Stand by me. Qué más quisiera yo. Tal y como me han dicho, porque yo siempre siempre hago lo que me dicen, voy a intentar describir mi estado de ánimo, por eso de conocernos mejor a nosotros mismos que solemos ser casi siempre nuestros grandes desconocidos. ¿Te lo demuestro? Nos miramos al espejo fijamente y ni nos saludamos... Creo que tenemos una relación muy extraña con nuestro yo interno. Obligados a convivir sin ni siquiera preguntárnoslo, aunque lo peor es que nunca llegaremos a conocer del todo a nuestro inquilino, siempre con nuevas sorpresas...

A lo que iba... Estoy... estoy... La primera palabra es loneliness. Dammit, maldito inglés. Una soledad extraña, porque tampoco es soledad, no siento ese tipo de vacío. Las cosas han cambiado, eso es un ciclo, ya no le tengo miedo al cambio, pero aun así es como si aún no se hubiesen asentado. Inestabilidad, ¡éso es! No es una montaña rusa como antes, lo cual estaba genial, super divertido. Ahora estoy como en una especie de barquita en medio de lago sin nadie alrededor. Y aunque el agua está muy calmada hay algo que no va bien. No sé por qué me vienen imágenes de bosques solitarios, la mayoría con niebla, al lado del lago, y nadie ni nada alrededor... Bueno, vale, ¡también hay árboles!



Para terminar, una pequeña exclamación: help! ¿Esa sensación de saber que te vas a hundir? Oh shit, la música, todo tiene que ver con la música, ¡mañana mismo renuevo el repertorio!

miércoles, 8 de diciembre de 2010

First

Me gustas cuando callas...
porque estás como ausente. Eso decía Neruda en sus 20 poemas de amor y una canción desesperada. La primera vez que oí el inicio del poema nº 15 me sorprendío mucho, estaba como fuera de contexto. La frase del comienzo siempre me descolocó. Y no fue hasta un tiempo después cuando descubrí lo que de verdad quería significar. Pero eso es un tema aparte, el amor y otros desastres naturales. O como quieras llamarlo.

¿Cómo se empieza un blog?

Los primeros intentos que tuve fueron bastante malos. Se supone que tienes que darte un poco a conocer y presentarte, pero ¿cómo se hace eso? ¿Nos conocemos tan bien como para hablar de nosotros? ¿Hasta qué punto? Se supone que debería de decir hola, ¿qué tal?; mi nombre es...; tengo...; me gusta...; etc. No me conozco, no sé quien soy. Quizá lo saben los demás, y es que creo que a menudo conocemos a mucha gente menos a nosotros mismos. ¿De verdad nos conocemos?

Pensamos, sentimos y hacemos impulsos de nuestro cuerpo. O al menos todas nuestras acciones derivan de ellas. Impulsos irracionales, que no sabemos de donde salen pero aparecen así, sin avisar, o avisando a veces... Y te destrozan, te reconstruyen, te pintan, te raspan (y te rayan). Somos un lienzo, un papel, una obra,... sobre los cuales esos impulsos, a veces más previsibles y otras menos, estrellan botes de pintura sobre nosotros, nos dan finas pinceladas retocando defectos y virtudes, con carboncillos nos matizan dándonos sombras y luces.

¿Qué relación tiene el mundo con Neruda cuando decidió escribir esa frase? Como para tantos otros enamorados o ex-enamorados, el mundo quedaba lejos. ¿Qué nos une al mundo? La gravedad, vale, una pregunta tonta. Pero además de eso, ¿qué?

sábado, 27 de noviembre de 2010

Si el mundo fuese una nuez...


... seguiría estando lleno de gusanos.

Hoy en día todo es culpa de la crisis, se ha vuelto en uno de los temas más comentados. Como cuando algún famoso comete un error patético o no tan patético y está en boca de todo el mundo. En realidad es lo que siempre ha querido pero no en mal sentido. Pobre famoso, todo el mundo se te ha echado encima y tú ya no sabes qué hacer. Y hartos de echarle la culpa a un concepto tan abstracto y al que no le afectan los insultos ni las quejas, derrochamos verborrea, por decirlo de manera suave, hacia políticos. Está bien, podemos embestir contra ellos pero... ¿no te has leído los cotilleos de la crisis? ¡Que la crisis no viene de los gobiernos! Super fuerte ya ves... Es "culpa" de los de siempre... ¿A que no sabes de quién?

¡NUESTRA!

Sí, sí... Lo que te digo. Y es que otra cosa no, pero irresponsables somos a más no poder. Qué afán por echarles las culpas al vecino... A la definición de ser humano le tacharía lo de ser racional por ser irresponsable. Quizás hasta le añadiría una i- delante de racional. Pero eso de la irracionalidad es otra historia.

Pobre crisis, qué mala época para ser esta palabra. Pero qué más da, nosotros sólo somos víctimas del capitalismo y del comunismo, somos víctimas del terrorismo económico, pobres de nosotros, tan indefensos ante las multinacionales... Qué será de nosotros... Mejor ir a rezar, o a comprar que viene a ser lo mismo, mejor escondernos en casa dentro de la tele, (que sí, que ver todas las tertulias está genial mientras sigas estando al tanto de la realidad, cosa que no pasa muy a menudo), mejor quejarnos sin parar hasta que nos muramos, mejor amargarnos la vida y amargársela al de al lado,... ¿Para qué preocuparnos por cambiar? Mucho mejor que sigamos siendo autómatas del dinero. Somos seres tradicionales, que se resisten al cambio hasta que se rompen. Y cuando nos rompemos: ¡joder, si es que todo es por el dinero!

Llamamos hipócritas a los falsos y no nos damos cuenta de que esa es nuestra naturaleza. Mentir para protegernos, porque nuestra herencia biológica al fin y al cabo tiene que asegurarse de nuestra propia supervivencia. Criticamos lo que nosotros hacemos, a veces nos damos cuenta otras no. Qué le vamos a hacer... Si es que es muy difícil cambiar...

Por eso son buenos los libros, porque reparten pensamientos, para hacernos pensar, para aislarnos por un momento del mundo que nos rodea sin hacernos inútiles. La televisión en teoría, en su versión pura, es uno de los mejores inventos del hombre (y la mujer, el tema del feminismo también es algo de lo que tengo que hablar, bueno, de tantas cosas tengo que hablar...). Pero claro, pasa lo de siempre, se corrompe, porque algo en manos de los seres humanos siempre acaba igual, en manos del dinero. No quiero malinterpretaciones, la televisión tiene pros y contras, ¡que no todo el blanco y negro! Que en cuanto alguien generaliza nos tiramos al cuello sin darle tiempo a explicarse.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Yo quiero...

Que no te quiero mirar...
Pero es que cierro los ojos y hasta te veo por dentro...

Bueno, eso era antes. Ahora sólo (¿o solo? ... estas normas de ortografía tan nuevas...) un poquito.

Mal humor, vete fuera, que así estoy muy bien. Qué bien sienta el buen humor, esa sonrisa, unas risas. Que te recorra un escalofrío al recordar algo (intencionalidad de los fenómenos mentales) placentero.

Puede que no tenga un lugar exacto, que me cambie (o me cambien) de sitio cada dos por tres. ¿Y qué? Tú ya no estás, esto no es lo que era. Ahora me río, ahora lo hecho de menos. ¿Dónde se han ido esas ganas de besarte que me acompañaban hasta en los sueños? Quizá sigan aquí, a la vuelta de la esquina, pero no creo que vaya a perseguirlas.

Hay temas que me enervan, toma ya la palabra que me hace una gracia... La política. ¿Por qué no hablan claro y lo llaman mercadillo de los domingos? Porque otra cosa no lo veo... Un engaño, una manera de enriquecerse mediante mentiras. En fin, que luego todo esto suena muy... pedante...

¡Pero es que me da rabia!

Cómo me gustan esos impulsos en los que sólo te sale sonreir para expresarte. Que es que... qué bonita forma de expresarse. Y es que sin un motivo en especial estoy feliz. O alegre o lo que sea, nunca he creído que la felicidad exista de verdad, pero eso es otro tema. Jocomomola. Me gusta, sí que sí.

lunes, 15 de noviembre de 2010

WTF



Que yo sé que la sonrisa que se dibuja en mi cara tiene que ver con la brisa que abanica tu mirada.

Como Camarón - Estopa con Sabina.

Y a veces te espero aunque tú no sepas que hemos quedado.

Me he rayado... me he atascado en una canción, de aquí no salgo. Todas las semanas van a ser las mejores de mi vida. Qué rotundo... Me suena a trola viniendo de mí. ¿Por qué tomárselo todo en serio? ¿Acaso importa? Qué relativo es el mundo.

Qué difícil es tomar el control de nuestros sentimientos. Parece que cuanto más tiendo hacia un lado luego el salto hacia el extremo es mucho más brusco. Como si a una balanza le añadieses kilos y más kilos hasta que de repente lo retirases en un instante todo el peso. Y yo estoy en el extremo que cada vez se carga más y más de energía y ánimos. Y, suddenly, se desinfla. Y salgo disparada. Así hasta la mañana siguiente.

La imagen: pues eso, que podemos hacerlo. Algo así de darse ánimos, unas palmaditas en la espalda. Pa'alante, pa'alante, que queda mucho camino. Y eso es lo bueno, relamerse por todo lo que falta, y pensar en lo bueno, sólo en lo bueno. Que lo malo es lo más fácil de ver. We can do it, I can change. I'll change...

sábado, 13 de noviembre de 2010

13/11/10

Invierno, frío y dulce invierno. Casi un año, casi un año, qué lejos queda todo. Hay tanto que quería decir y se me ha olvidado... He reducido mi tiempo para escribir, más bien para todo. No sé qué hago con los minutos y las horas, se me pierden cada dos por tres...

Y es que ya no quiero escribir más, todo lo que tengo que decir se reduce a pensamientos, ¿dónde están esas esperanzas? Sí, esas que me ayudaban a levantarme con una sonrisa en vez de una cara neutra. Porque, seriously, quiero que vuelva. Sea lo que sea, para bien o para mal, quiero esa ilusión de vuelta a mi vida. No es tristeza, no es felicidad, es algo en el medio. Es normal... ¡NO!

Puaj, normal... ¡la vida es extraordinaria! Una vida aburrida y normal, no por favor... Tampoco es eso, no me estoy refiriendo a algo amargante. De hecho, excepto esta última semana (examen de lengua), todo ha estado muy bien, con sus altibajos necesarios, pero en equilibrio.

Soy todo lo que pasa... ¿y qué me está pasando?

PD: debido al vacío mental que tengo el título es simplemente la fecha de hoy.

sábado, 30 de octubre de 2010

One way or another


Aprecia tu vida, que la primavera dura un segundo. Antes de que te acosen las arrugas y las canas, hazte el sabio y disfruta. No confundas disfrutar con destrozar, que no consiste en pasarse con todo. Claro que todo lo que digo aquí probablemente lo desdiga dentro de un tiempo. ¿Y qué? ¿Y qué si todo se derrumba? Siempre se sale de debajo de las ruinas, ya sea arrastrándonos por los escombros o explotando y tirándolo todo por los aires, como una bomba. Qué mínimo es todo, qué grande, qué relativo. La vida es un instante, eso dicen. Y qué exagerados son...

La vida está hecha de momentos únicos, sé que no soy la primera en decirlo, pero ¿realmente nos damos cuenta de lo que eso significa? Espabila, no va llegar un época en la que todo sea perfecta y maravillosa, podrá haber épocas mejores y peores, está en tu mano hacer que todas sean rememorables o al menos no lamentables. No te quedes esperando la era dorada de tu vida, toda tu existencia es de oro, plata y cobre. Todo llegará, o irás tú a buscarlo, el truco está en no quedarse parado mientras esperas para recibir o para conseguir lo que tanto ansias. Y es que cómo cuesta expresarse, lo que quiero decir es que no pienses tanto, no le des vueltas al mundo, él ya se encarga de marearnos lo suficiente, vive, vive, vive con todas tus fuerzas. Y cuando tengas que pasarlo mal intenta hacerlo lo más rápido posible, para volver con energía a las ganas de reir. Para hacer reir a quien tú quieras. Porque sobre todo, quiere. Quiere siempre a alguien, haz que tu vida sea valiosa no solo para ti. Comparte, no la merienda (aunque eso también), pero sí tu vida, tu risa. Una sonrisa es lo mejor que podemos ofrecer de nosotros mismos, la mejor presentación. Sin tener en cuenta nada más, sonríe. Que la gente se de cuenta que tú eres de los mejores, de esos que disfrutan de ver una hoja caer. Y no sientas envidia si a veces son los demás los que sonríen y tú no, saca la fuerza del dolor para darle la vuelta a la situación, sí, con una sonrisa.

Toda época de tu vida es perfecta, sólo depende de cómo lo mires.

Y por cierto, vive, es asunto tuyo. O eso dicen...

PD: la entrada de hoy no la he escrito por un estado de euforia absoluta sino porque he tenido un momento de lucidez. La de la foto, Blondie, que he estado escuchando algo de ella. Y el título, una canción suya.

miércoles, 27 de octubre de 2010

Ruido silencioso

Mis padres vivían encima de una discoteca, todos los días se quejaban los de la discoteca porque hacían mucho ruido.

Así empieza Sabina una canción, de ahí el título de la entrada de hoy. Bf, es como si un torbellino hubiese entrado en mi vida, un huracán. Porque estoy montada en una montaña rusa, lo que la verdad me da igual, pero no estoy segura de a lo que llevará tanta subida y tanto bajón.

Estoy como un papel en blanco, es hora de escribir cosas nuevas, ya me he reciclado, procuraré no utilizar tanto tipex y hacer menos borrones. Sé que me toca esforzarme, para cambiar. Porque no quiero ser como quien yo me sé. En fin, el post para despotricar contra él será otro día, ¡quiero irme a la cama feliz!

Y de repente, no sé qué más decir. Me he vaciado, empty, empty... Pero no vacía en el mal sentido, sólo que ahora mismo estoy... pues eso vacía. Tan solo unas tremendas ganas de vivir, que no está nada mal, de sentir todo lo que no he podido disfrutar. Y esa euforia me asusta, esa alegría instantánea me da miedo, porque no sé si alguna vez parará. No quiero que se termine, no quiero volver a empezar, me ha costado darme cuenta de lo que hay que hacer, ¿y si es todo un movimiento de ida y vuelta?, ¿y si siempre se vuelve a empezar? La vida es una escuela, vas aprendiendo de todo lo que te pasa y no te pasa, pero ¿y si con los sentimientos, la consciencia y el inconsciente no funciona así? No sé, que pedazo de movida tengo en la cabeza.

Ahora es cuando aplico me norma de oro: ¡qué más da! Sólo hay que pensar en lo que de verdad importa, qué más da lo que tenga que pasar... Hay que pasar por la vida y no dejar que la vida pase por ti (eso lo dice mi profe de filosofía, qué tío...).

Me voy a dar otra vuelta a la montaña esta de las narices, hasta mañana, la cama también me espera... Recuérdame que algún día tengo que comentar lo mucho que adoro a mi cama...

martes, 19 de octubre de 2010

Pastillas de freno


El otro día tuve una tarde extraña, como el inicio de una novela, o al menos esa sensación me dio, que somos libres de sentir lo que queramos.

Los semáforos parecen señales de salida para la gente que espera en los pasos de cebra, como una competición para ver quién llega antes, quién se lo toma con más calma. Si estás dispuesto a no esperar que el muñequito se ponga en verde y salir pitando cuando se encienda el rojo para los coches o quedarse quieta observando al mundo andar deprisa, que parece que todos llegan tarde a algún lado. Caminando por la calle como si la tierra fuese mía, o algo parecido, como si la alegría surgiese de cada esquina, pasos saltarines, manos en los bolsillos, moviendo los brazos. Y esos cascos en las orejas, a todo trapo o muy bajito.

Llegué a casa de la señora, la señora que tenía el libro que mi tía le había dado a su hija, a por el libro. Te estaba esperando, me dijo. Parecía que se había arreglado únicamente para esa visita. Puede sonar raro, pero a mí me sonó a novelón... En fin, sensaciones extrañas.

Manos que se agarran para no soltarse, trozos de papel en los bolsillos, pensamientos divididos, tareas olvidadas. Faltan pedazos de algo. Falta algo. Algo no encaja.

El otro día leí una pregunta que no tengo ganas de darle vueltas, ¿se nace o se hace? Depende (de qué depende...), todo es relativo, ese es mi máximo. El cúmulo de circunstancias nos hacen un determinado tipo de persona, pero también nacemos de una manera. ¿Qué nos hace más persona? ¿Los genes o lo que nos rodea? Lo que nos rodea son más que nada personas, ¿nos hacemos así según las personas que nos rodean? Sí, será eso.

Partimos con un molde sin amoldar, y hasta que no nos damos cuenta de que somos nosotros los artesanos de nuestra propia vida no comprenderemos en qué consiste eso de vivir. Es el amor el que normalmente nos hace madurar, bueno el amor y un par de cosas más, al menos en mi caso. Un día despiertas y no eres la misma, pero no has dado el cambio durante la noche sino en un determinado momento empezaste a cambiar y ahora eres otra. No, no eres otra persona, es que has cambiado tu punto de vista, ya no lo ves todo gris, negro y blanco (que ya tenías gris en tu escala), ahora todo se ve con matices, has abierto los ojos. Y si sabes aprovecharte, lo verás todo con colores. Porque el mundo despierta y tú con él, vive ese mundo que se acaba de despejar para ti, sólo para ti. Disfrútalo, el mantel ya está puesto.

viernes, 15 de octubre de 2010

Say what you need to say

Tanto tiempo sin decir lo que necesito decir. Llevo tanto tiempo callándome, resignándome, cómo odio esa palabra. Mejor dejar que pase el tiempo, pensé, pero es que nada cambia, sigo sintiendo lo mismo.

Di lo que necesites decir, ¿no? Hay tanto que he dicho pero que nadie ha escuchado. A veces el silencio es la mejor companía a la que contárselo todo cuando no puedes hablar con quien de verdad quieres hablar.

Que te quise, que te quiero. Que no te quise querer, que no te quiero querer. El amor es algo tan raro, tan simple, somos nosotros los que lo complicamos. Me caí y no me levanté por apoyarme en las esperanzas. No me arrepiento, ahora se a que se refería todo el mundo, me gusta pensar que la gente no se guía por el dinero, que también, sino por el amor, un sentimiento que tiene la fuerza para hacer girar al planeta entero. Qué grande el amor, me pilló desprevenida.

¿Cómo prometer no enamorarse?
¿Cómo olvidar lo que nunca paso?
No puedo evitarlo, he dejado de luchar , ya se ira.
Y sin saber cómo, te quiero.

Y eso es todo, una estupidez al fin y al cabo, ¿qué más da lo que sienta? Lo que de verdad importa es la amistad, al menos en este caso. Pongo un ejemplo:

- Me gustan mucho las pipas.
- A mí no.
- Vale.

¡Así de simple! ¿Por qué complicarse? Si es que es muy sencillo, ¡no vamos a dejar de hablarnos porque no te gusten las pipas! Yo no puedo evitarlo, tú tampoco, no es culpa de nadie.

Fue un error lo que pasó, no voy a negarte que me hubiese gustado decírtelo pero desde luego no estando yo en ese estado. Lo siento mucho si te ha molestado, créeme, no fui yo, fue mi subconsciente, ya ves el poder que tiene.

PD: ¿el tipi sigue en pie?

domingo, 10 de octubre de 2010

Pañuelos de no llorar

Estoy costipada, o constipada como dice mi hermana, no puedo respirar y eso es precisamente lo que más necesito hacer hoy. Pero eso no quita que este dia ha sido uno bueno. Porque en mi cabeza yo me había metido un virus de optimismo, que no soy ni seré como antes.

Así es que te diré que he tenido un día horrible como hija, y como estudiante... Pero el resto ha estado bien. No me gusta no sentirme a gusto conmigo misma, es incómodo mirarme al espejo y al ver tu reflejo veas algo que no te convence, que odias. Quizás odiar sea excesivo, pero algo parecido. En fin, mi pensamiento positivo anda un poco tocado estos días y ¡NO! No hay nada peor que volver hacia atrás cuando te ha costado tanto avanzar.

Y otro pañuelo más a la papelera, ¡si es que parece que lloro por la nariz!

Estaba yo escuchando una canción de Sabina, Pastillas para no soñar, y se me ha ocurrido: ¿quién no va a querer soñar? Es todo lo que te queda cuando no tienes nada, lo que te levanta del agujero más profundo. Soñar con todo lo que tiene que venir, con lo que más desees. Ay, esto hay que pensarlo mucho y escribirlo en profundidad, ¿o será al revés? Se me ha bloqueado la mente, no debería haber empezado a teclar... Demasiada mucosidad para pensar, ¡a lo mejor se me está cayendo el cerebro!

A ver qué tal me va mañana, seguuuuro que consigo recupearar mi pensamiento optimista y todas las normas que me había marcado, y esta vez prometo coserlos a mi piel (como la sombra vaya...).

AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA

Hasta mañana en el desayuno!

viernes, 8 de octubre de 2010

Y tiene nombre de mujer

Bfff, ¡cuánto tiempo! Volví de allí hace ya dos semanas, esas han sido mis vacaciones, tanto por hacer y tan poco pensar en... Ultimamente he estado mega-ultra-hiper (prefijos...) agobiada, yo... ¡que me ahogo en un vaso de aire! Todo está en su sitio, aunque todo esté cambiado. La gente tiene metamorfosis, o quizás sólo haya sido yo.

Joe, en este tiempo he pensado muuuchas cosas, muchas por decir, nada por callar. Solamente una, a lo mejor algún día saldrá. Está escrito en un borrador, como tantas otras, no lo terminé. Será mejor así, ¿no? Siempre esa interrogación, tal y como están las cosas ¿por qué quiero arriesgarme? Si sé la respuesta, ¿para qué soñar cosas imposibles? Pues porque así funciona el cerebro, pero la cosa es que no quiero limitarme a soñar, al menos no contigo. No es justo, ser así de cobarde no me gusta. Pero es que aquí lo de ser valiente no me va a valer mucho.

Otra cosa... todo nuestros pensamientos... ¿son reclicados? Me gusta creer que cuando pienso algo, alguien en cualquier lugar, o incluso en cualquier tiempo, ha pensado eso también. No nos conocemos, pero toda la tierra comparte ideas, sentimientos,... Son todos los mismos, todos usados, ninguno nuevo. Quizás nuevo en nosotros, pero no para el mundo. Tanto se le ha escrito al amor, ¿no debería estar ya harto del tributo de los huevos? Estoy segura de que es el tema más discutido, admirado, odiado, etc.

La gente suele decir que el mundo, es decir, ellos mismos, se mueve por y para el dinero. No por poder, no por su atractivo físico, que también son factores tremendamente influyentes, sino por dinero. Papel, es papel, a veces incluso virtual (por eso de la bolsa bursátil, es que estoy estudiando economía, ya contaré...).

No puedo creer que en un país taaaaaaan apasionado por el ejército, con esa devoción por la patria y demás, no deje que una persona con una determinado orientación sexual sirva. Super fuerte. ¿Quiénes se han creído que somos? ¿Quiénes nos hemos creído que son? Todos somos igual de insignicantes, ¿por qué te crees mejor y superior, y simplemente con más poder, para prohibir al colectivo homosexual casarse? No me gusta hablar de la política, especialmente de la española, está demostrado (¿científicamente?) que discutir, ya sea con buenas intenciones o con ganas de insultar, con determinadas personas es algo muy dañino para los oídos, y para el cerebro. Tanto odio hacia algo... Y que conste que hablo de un tipo de determinadas personas, no me refiero a esas que respetuosas, racionales, que pueden entablar un dialógo sin ofender a nadie,... ¿Conocéis a alguna de ese tipo? ¿A cuántas?

OMG, cuántas injusticias, cuánta ira y rabia crean,... Y la gente sentada, y la que está de pie intentando defender... Son tan pocas, y yo aquí sentada... ¿De qué sirve estudiar? ¿De qué sirve la moda? ¿De qué sirve nada? Mira cómo está el mundo, ¿realmente vale la pena construir y educar a jóvenes sobre una plataforma tan podrida, tan inestable, tan falsa, tan superficial?

Y con ésta y un bizcocho, hasta mañana a las ocho (y vente...).

PD: ¡¡hoy he vuelto a correr!!

martes, 31 de agosto de 2010

Y sentir que no estamos muertos


¿Qué nos impacta hoy en día? Supongo que es diferente para cada uno. Hay veces que me sorprendo por algo sin importancia y sin embargo otras me resultan lógicas, como si fuese inevitable que ocurrieran. Y son esas cosas que me parecen "normales" las que más impactan a otra gente, por lo general, más mayor que yo. ¿Qué pasa entonces? ¿Nos estamos acostumbrando a un mundo lleno de injusticias lo cual nos parece lo más normal? ¿Cuánta gente hay por ahí que aunque les impacten esas cosas tan horribles que pasan, que no les parece tan normal que pase, les afecta pero se habitúan a ello?

No me gusta la especie humana, hacemos demasiado daño en comparación con lo bueno. Además, todo lo bueno es para subsanar lo malo, no realizamos el bien en el planeta. Por supuesto, algunos (cada vez más, o eso dicen...) reciclan, ayudan a gente desfavorecida, luchan contra las injusticias,... Pero, ¿hay algo que no sea provocado por nosotros? El efecto invernadero, culpa nuestra, la pobreza y el hambre, culpa nuestra, todo tipo de injusticias, culpa nuestra.

Luego también está la gente que se ríe de los que sólo se quejan, de los que escriben y tal en vez de ponerse a abrazar árboles. Son excepciones, por cierto. Perdonad por no tener tan alto karma, pero hay que ser realistas. Necesitamos más acciones individuales, pero sobre todo colectivas. De todas formas, es mucho más difícil lo segundo, así es que habrá que conseguir lo primero a nivel mundial.

Los humanos somos una plaga muy difícil de exterminar. Todos los animales colaboran en el ecosistema global, ¿y nosotros? ¿Qué ayuda proporcionamos? Esto es un asunto de todos. En fin, un tema demasiado discutido.

A propósito de la imagen, una muy buena acción: planta un árbol. Lo ideal sería uno cada hora, pero debido a la falta de tiempo tan usual en el ser humano, uno a la semana ayudaría. ¿Por qué no crear una empresa para la reforestación? Yo me apunto, ¿quién más?

Una página interesante para visitar: http://www.quisqueyaverde.org/

domingo, 29 de agosto de 2010

¿Me concede este baile?


Que ésa no soy yo, no me digas qué hacer, no me disfraces de lo que no soy. No me hagas ocultarme, no soy así. Déjame equivocarme. Permíteme ser quien soy.

No me trates así, no me lo merezco. No me impidas cambiar, no seré como tú.

Pobre tortuga, ha llegado tarde.
Lenta y con caparazón,
el amor se ha marchado
no se ha llevado nada,
sólo sus ilusiones.
Claro, se habían adelantado.
Estaba enamorada.

Uhm...

Hay una canción que se llama "Baile de ilusiones", y dice: "la vida es un baile de ilusiones y el que no baila está muerto". En la foto, Ariel Rot, que también la canta con Fito.

¿Me concedes este baile?

Ahora que estoy pensando en la dirección del blog, ¿por qué se llama mosquito tatuado? Bueno la verdad es que nunca he visto ninguno, ¡tiene que ser difícil tatuar a un bicho tan delgado! Mejor dejar de escribir por hoy, sólo digo tonterías. Creo que los enfados restan imaginación y las ganas de hacer cosas.

sábado, 28 de agosto de 2010

Al cantar

Para mí esto es como una especie de diario. O mejor dicho, un refugio. No sé por qué a veces em cuesta tanto sentirme a gusto. Me gusta creer que tengo muchos pedacitos de mi intimidad repartidos por ahí, en la gente, en mí, en algunos lugares, en las canciones, en los libros. Y ésos son mis refugios. Momentos en los que te sientes tan bien que nada te importa.

Algo así como la canción de Platero y tú (¡oh yeah!), Al cantar. Aquí la letra, aquí la canción.

http://www.youtube.com/watch?v=wBWNYBi0e0U


Al cantar me puelo olvidar
de todos los malos momentos
convertir en virtud defectos.

Desterrar la vulgaridad
aunque sólo sea un momento
y sentir que no estamos muertos.

No es placer: es necesidad.
Es viento, es lluvia y es fuego
derramar todos mis secretos.

Y busqué en el fondo del mar,
en las montañas y en el cielo
la manera de hacer realidad mis sueños.

Encontré en el corazón
el mapa de los sentimientos.
Ya lo ves... no estaba tan lejos.

No es placer: es necesidad.
Es viento, es lluvia y es fuego
derramar todos mis secretos.

Esnifar los rayos del sol
y descongelar el cerebro
y sentir que no estamos muertos...

Cómo me gusta esta canción.

jueves, 26 de agosto de 2010

Las maletas en el maletero


Cómo odio hacer maletas, tantas cosas que meter y tan poco espacio. No me gusta discriminar mi ropa. Dentro de ¿7? días me voy a algún sitio cerca de Washington, una bendita beca ha salvado mis vacaciones que han sido demasiado aburridas. Qué lío de todo, cuántas cosas que hacer, me encanta viajar pero los preparativos los odio. Para rematar, la echo de menos.

Antes de irme con mis padres estaba convencida de que lo que necesitaba para olvidar eran unas largar vacaciones. Y sí, ya no es como antes, no con tanta ¿intensidad? Definitivamente ya no es como hace unos meses. Esa época pasó, ¡qué ganitas tenía de acabarla! No más pensar en lo que nunca pasó.

¡Qué divertido! (corre whisky por mis venas...) No hombre, eso no, es la canción de mi querido Fito. Ayer descubrí un grupo interesante de los 70-80, The Runaways, por fin algo con lo que renovar mi repertorio musical. Y un peliculón, Precious. Llevaba un montón de tiempo para ver esa peli hasta que ayer, ¡por fin!, la saqué del videoclub. Qué... impactante. Es un drama que no te deja triste, a pesar de las desgracias de la pobre protagonista. En definitiva, merece ver la peli, totalmente recomendable.

Qué ganas de poder buscarte, encontrarte y descubrirte, sobre todo la última parte. No quiero poner el tópico: "con ganas de comerme el mundo". Porque tampoco es eso, creo. Sólo te quiero a ti, y como no puede ser, pues me quedo con las ganas y sigo imaginando, soñando. Para algún día dejar de hacerlo y vivirlo. Ya llegará, ya llegaré. Uhm, :)

Sonrisas (no lágrimas)



Guau, parece que fue ayer cuando me fui, siento que todo es distinto a pesar de que todo sigue igual. No sé nada, sólo siento. De acuerdo, vale que quizás, sólo quizás, te siga queriendo, pero se acabó (¡como la canción!) eso de pasarlo mal. Ahora voy a cambiar para mejor, a disfrutar de todo lo que tengo, no a pensar en lo que podría tener. Qué malos consejeros son los recuerdos que nunca tuviste y te gustaría tener. Se acabaron esos puntos suspensivos que denotan tristeza, a partir de ahora sólo los pondré para indicar ironía o, bueno no sé, pero de todo menos tristeza.

Me gusta sentirme fuerte. Me gusta sentirme capaz. Superarme, sonreir, transformar el enfado en lo contrario. Qué caro es ser feliz, qué fácil estar alegre. Ahora me gusta mi sonrisa, aunque siempre me ha parecido forzada, había algo que no encajaba en mi cara cuando sonreía. Ya no, tengo la certeza de que una sonrisa es el mejor regalo que le puedes dar a alguien a quien quieres, que es la posesión más bonita, y me atrevería a decir que útil, que tenemos.

Siempre me han causado envidia las personas desconocidas que son, o parecen, felices. Me parecen enemigos dispuestos a arruinar todos mis intentos para parecerme a ellos. Tampoco me gustan los días soleados, no sé por qué me entristecen. Como si en un día perfecto todo el mundo fuese feliz menos yo. Como si me hubiese quedado atrás en una carrera que ni siquiera sabía que existía. Es una tontería, pero esos días tan maravillosos son los que más me cuesta afrontar. Aunque luego, cuando ya ha pasado un rato y el cielo está tan claro, me relajo y otra vez es como siempre. Es una tontería demasiado grande, ¿y qué? No me gusta que el día empiece con una bonita mañana, refiriéndome al tiempo claro. Así está mejor resumido.

jueves, 8 de julio de 2010

Sueños son

Último día en Badajoz, mañana me voy a unas interminables vacaciones con mis padres. No me quejaré más, hay que ser optimista (con X de mixta). No sé por qué yo quería despedirme esta vez de forma diferente. Hay algo que va a cambiar y no sé el qué pero estoy intrigada. Tengo el extraño presentimiento de que debería despedirme correctamente de las cosas que hay ahora porque no van a seguir igual. Nunca me han gustado los cambios, ese tipo que no son ni para peor ni para mejor, me sientan mal.

Sin embargo, a pesar de que los echaré un montón de menos, no estoy tan disgustada por irme. Sé que al final ellos también se irán por ahí por lo que la separación era inminente. Pero me resisto. Hay algo que siempre le he querido decir a alguien. Tengo esa espina aquí clavada por haberme callado tantas cosas.

A pesar de estos discursos que me dicto a mí misma casi todos los días, en mi interior estoy casi segura de que algún día todo saldrá y seré libre. Quizá ésa sea la clave para olvidar. Yo había venido aquí a despedirme. Adiós, nos veremos en agosto. Espero volver con sueños renovados, que esta distancia no se me haga tan grande por no llevarme al menos un beso de quien yo me sé.

Aunque no viene a cuento, de verdad que tengo que escribir historias basándome en algunas canciones. Se me ocurren un montón... ¡Cuánto me gusta imaginar! Decidido, de mayor voy a ser imaginadora profesional, supongo que así empezaron los de Imaginarium.

miércoles, 7 de julio de 2010

La playa

No sé qué narices tienen las canciones de La Oreja de Van Gogh que cada una de ellas me hacen imaginar una historia fantástica y lo más extraño es que, por un momento, me da la sensación de haberlas vivido. Hombre, todas todas pues no, pero sí todas las del disco de "LGVD Grandes Éxitos". Aquí haciendo publicidad y yo escuchándolo por spotify... En fin, con esto quiero decir que escribiría en total 16 historias sobre las 16 canciones del disco. Algún día lo haré...

Este calor me hace dormir... y escribir. Se ha convertido en rutina eso de escribir en el balcón de mi casa, a la luz de una farola. Garabatear todo lo que se me ocurre. Lo mejor, la soledad que se respira desde allí (y el fresquito también). Con los cascos bien situados me siento en el mármol. Nunca aparecen las estrellas, al menos no las bonitas. ¿Cuántas veces he escrito, recordando a Pablo Neruda, la noche no está estrellada y tú no estás conmigo? Nunca conmigo.

Por cierto, hoy tenía pensado poner de título una canción de Platero y tú. Lástima, no debí escuchar a la oreja antes de escribir. Jo, me he quedado con las ganas de cantar "Al cantar".

Sin nada más que decir, al menos antes de decir algo que no debo, me despido.

viernes, 4 de junio de 2010

Gigante y tan pequeño aún

Subamos al tejado
no quiero contemplar las estrellas
me conformo contigo
sólo quiero sentir cómo la niebla nos envuelve
y en medio de esta curiosa oscuridad quizá te abrace
para que te des cuenta de que no pienso irme,
¿te apetece?
No quiero prometerte la luna, ni el cielo
ni siquiera amor eterno
pero sí te prometo un beso cada mañana al despertar.

A lo mejor un buen tema para inaugurar el blog sea el cine. O mejor aún, las críticas de cine. Hace unos días estaba buscando información sobre la nueva película de Julio Medem, Habitación en Roma. No la he visto, aún no sé si la veré, trata de dos chicas, una española y la otra rusa, que se encuentran en Roma y sin conocerse pasan la noche juntas. Las opiniones sobre esta películas con muy variadas, para gustos los colores. Pero al meterme en una web y leer una crítica, y los comentarios a dicha crítica, me quedé pasmada. Una "persona" se dedicó a criticar algo sin ni siquiera haberla visto insultando tanto al director como a las protagonistas. Y para rematar comentó algo sobre masturbarse con las escenas "interesanes". De acuerdo, la película no es para niños pequeños, pero ¿realmente hay necesidad de hacer semejantes comentarios homófobos y retrógrados? Y si la persona que escribió la crítica se lució, los comentarios fueron lo nunca visto. Me pareció terriblemente insultante y humillante.

En fin, próxima actualización... ¡Cuando encuentre la libreta con todo lo que tenía escrito!